El diputado de la UCR fue el único que se abstuvo en la demanda. Si bien criticó con dureza los dichos del Presidente sobre el fiscal Diego Luciani, señaló que “no ameritan un juicio político”.
El diputado Facundo Manes volvió a delimitarse del bloque de Juntos por el Cambio tras negarse a firmar el pedido de juicio político al presidente Alberto Fernández luego de sus dichos sobre el fiscal Diego Luciani.
El radical fue el único que se abstuvo del pedido al argumentar que si bien las declaraciones del mandatario fueron repudiables, no configuran una situación que amerite su destitución. Las críticas de su compañeros de coalición no tardaron en llegar por lo que el neurocientífico se encargó de aclarar que la negativa apunta a preservar la institucionalidad.
“Lo que dijo el Presidente es bochornoso, repudiable, yo lo rechazo totalmente. Es gravísimo, pero los países fracasan por las instituciones y el pedido de juicio político es una medida extrema“, argumentó en diálogo con TN, y reveló: “Hubo una discusión, seria, larga, pero el bloque no es una manada. No estoy de acuerdo, no voy en contra del bloque. Quiero ganarle al kirchnerismo, transformar la Argentina para que no vuelvan, pero quiero valorar las instituciones. En mi opinión las expresiones desagradables del Presidente, que rechazo, no ameritan un juicio político“.
En la misma línea, el legislador de de Juntos por el Cambio respaldó sus dichos a través de un extenso descargo desde sus redes sociales.
“No hay dudas de que los dichos del Presidente son irresponsables, peligrosos e INDIGNANTES. No vamos a tolerar declaraciones mafiosas en la Argentina. Pero esta no es una situación que llame a un juicio político“, reiteró Manes a través de un hilo de Twitter compuesto por ocho publicaciones.
Además, sumó: “Seamos claros: un pedido de juicio político es una medida para remover al Presidente. Es una medida extrema para el funcionamiento institucional del sistema democrático que no se puede banalizar“.
Para el diputado, “no se pueden realizar pedidos de juicio político de forma prematura, por la gravedad institucional que esto implica. Es una decisión que debe analizarse y debatirse profundamente“.
En tanto, no se privó de culpar a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner por los hechos de corrupción en la obra pública de los que se la acusa en la causa que lleva adelante el Tribunal Oral N°2.
“No nos olvidemos: acá hubo un DELITO GRAVE. Se robaron plata de todos, muchísima plata que no se invirtió en el bienestar de los argentinos. Es un delito que tiene que juzgar la justicia, independientemente de la política, para recuperar esos recursos y devolverlos a la sociedad. NO ES UNA DISCUSIÓN POLÍTICA, ES UN DELITO. No desviemos la atención. Dejemos de lado las especulaciones electorales y permitamos que la justicia actúe”, amplió.
A pesar de la la denuncia, para el opositor la discusión no debe trasladarse del plano judicial al político, dado que, a su entender, dicha estrategia beneficia al oficialismo porque “sigue apelando a la grieta que nos trajo hasta acá y les permite mantener sus privilegios”.
“Los ciudadanos le pedimos al Presidente una justicia sin privilegios y que gobierne para sacar el país adelante. Y que, de una vez por todas, pongamos el foco en los temas que verdaderamente importan: corrupción, hambre, inflación, recortes en salud y educación, falta de rumbo”, concluyó.
NA