¿Pueden los chimpancés hablar? Nuevos hallazgos en videos antiguos muestran a simios pronunciando palabras como “mamá”, reavivando el debate científico sobre la capacidad de lenguaje en los grandes simios.
Un pequeño equipo de de especialistas del habla y psicólogos de Suecia, Reino Unido y Suiza ha reavivado el debate sobre si los simios pueden hablar tras analizar antiguos videos de al menos tres chimpancés que parecen decir “mamá” ante la cámara. Este trabajo, publicado en la revista Scientific Reports, pone en tela de juicio creencias muy arraigadas sobre la capacidad del habla en nuestros parientes más cercanos, sugiriendo que ya poseían los “circuitos neuronales” necesarios para un habla rudimentaria.
El equipo de investigadores, liderado por el foniatra y científico cognitivo Axel Ekström del KTH Royal Institute of Technology (Suecia), examinó videos antiguos de acceso público que muestran a chimpancés (Pan troglodytes) sin parentesco y de diferentes continentes aparentemente pronunciando palabras humanas. En particular, se centraron en tres casos: el de Johnny, un chimpancé del Santuario de Primates Suncoast en Florida, que repetía “mamá” en un video; el de un chimpancé en Italia que también parecía decir “mamá”; y el de un tercer chimpancé, grabado en los años 60, que supuestamente decía “papá” y “taza”.
Este hallazgo sugiere que la capacidad de producir sonidos similares a palabras humanas podría ser más común en los grandes simios de lo que se pensaba, desafiando la noción largamente sostenida de que solo los humanos tienen la capacidad de formar sonidos con sentido y potencialmente cambiando nuestra comprensión de la evolución del lenguaje.
“Nuestros hallazgos demuestran que, a falta de un examen directo basado en datos, se han subestimado las capacidades de producción vocal de los grandes simios”, escribieron los investigadores en el estudio.
Análisis fonético
Los investigadores realizaron un análisis fonético de las grabaciones, algo que no se había hecho antes. Utilizando espectrogramas, encontraron características “fácilmente identificables” que mostraban signos de producción silábica. Concluyeron que los simios eran capaces de realizar “contrastes fonéticos de consonante a vocal”, combinando los sonidos “M” y “A” mediante el uso de la voz, la mandíbula y los labios, de manera similar a los humanos.
Para validar sus hallazgos, los científicos reprodujeron las grabaciones de los chimpancés a oyentes humanos que desconocían su origen, junto con grabaciones de personas con patologías del habla. La mayoría de los participantes fueron capaces de identificar la palabra “mamá” en los sonidos emitidos por los simios.
“El eslabón perdido que impide a los chimpancés acoplar voluntariamente mandíbula y voz evidentemente no existe”, afirmaron los investigadores en su estudio.
La importancia de estos descubrimientos radica en su potencial para reevaluar lo que sabemos sobre el desarrollo del lenguaje en nuestra propia especie. Si bien los chimpancés y los humanos compartieron un último ancestro común hace millones de años, estas habilidades vocales, el sistema neurológico audiovocal, pueden haber estado presentes mucho antes de lo que se pensaba, indicando que la capacidad para el lenguaje podría ser más antigua y no exclusiva de los humanos.
El debate continúa
Sin embargo, el estudio ha generado división en la comunidad científica. Algunos expertos, como Julia Fischer del Centro Alemán de Primates, argumentan que los simios simplemente estaban emitiendo gruñidos y siendo recompensados por ello, sin que esto tenga relación con el habla humana.
“Lo que los simios hacen vocalmente no tiene nada que ver con el habla humana”, declaró Fischer a The New York Times.
Otros expertos, como Michel Belyk de la Universidad de Edge Hill (Reino Unido), tienen una perspectiva diferente y consideran que estos hallazgos sugieren que los circuitos neuronales necesarios para el habla podrían haber sido heredados de un ancestro común con los chimpancés.
“La humanidad, a pesar de todas sus particularidades, no surgió de debajo de una piedra, sino que fue moldeada por la evolución a partir de la arcilla de nuestros antepasados primates”, declaró Belyk a The New York Times.
Por otra parte, los investigadores reconocen que estudios anteriores sobre el lenguaje de los grandes simios fueron desacreditados debido a cuestiones éticas, ya que los animales eran sometidos a condiciones antinaturales. No obstante, argumentan que la ausencia de pruebas no es lo mismo que la prueba de la ausencia.
Ekström y su equipo concluyen que “los grandes simios pueden producir palabras humanas” y que “el no haberlo demostrado hace medio siglo fue culpa de los investigadores, no de los animales”.
Esta investigación podría alterar profundamente nuestra percepción sobre la evolución del lenguaje y las habilidades cognitivas de los grandes simios, destacando además la necesidad de revisar investigaciones anteriores bajo un enfoque más ético y meticuloso.
Editado por Felipe Espinosa Wang con información de Scientific Reports, Science Alert y The New York Times.
Fuente: dw.com