Mauricio Macri salió en defensa de los fiscales que pidieron 12 años de prisión para la vicepresidenta Cristina Kirchner y respudió los dichos del presidente Alberto Fernández sobre Diego Luciani y Alberto Nisman.
“Claramente, este bastardeo y esta destrucción de la palabra presidencial ha sido muy dañino para el país. Además, atribuyéndose cualidades de jurista que no tiene, ha violentado la Constitución una vez más”, afirmó el exmandatario durante un acto organizado por la Bolsa de Comercio de Córdoba.
De esa manera, se refirió a la entrevista televisiva en la que el jefe de Estado señaló:
“Realmente, alentar la idea de que le puede pasar algo al fiscal Luciani. Hasta acá, lo que le pasó a Nisman es que se suicidó, hasta acá no le pasó otra cosa. Yo espero que no haga algo así el fiscal Luciani”.
“Estamos ante un Presidente sin plan, sin rumbo, con mucha ineptitud y mucha improvisación”, consideró Macri, quien remarcó: “Hay futuro. No hay presente. Lamentablemente no hay presente. Hay un rejunte para recuperar el poder y batallar por la impunidad”.
Respecto a la exposición que hizo la vicepresidenta en redes sociales como “derecho a defensa” tras el pedido de prisión de los fiscales en el juicio por la obra pública en Santa Cruz, el ex jefe de Estado diferenció: “Vialidad Nacional es una muestra de que somos distintos. Eran todas licitaciones transparentes y nunca nadie se quejó ni hubo denuncias. El kilómetro costó el 50% de lo que costó con el kirchnerismo. En nuestro gobierno no hubo ningún (Lázaro) Báez”.
Tras preguntarse hasta dónde puede aguantar el país el “colapso de una variante del peronismo, como es el kirchnerismo”, Macri destacó: “Lo que ellos hagan o digan es una cosa. La sociedad está más fuerte que nunca. No van a poder avanzar sobre la sociedad”.
“Estuvimos más en posición de riesgo años atrás. Hoy siento que la gente está más sólida, más lista para salir a la calle si alguien quiere llevarse por delante nuestra libertad. Para tener futuro hay que tener libertad, después viene una macroeconomía equilibrada, después una revolución de la educación”, añadió.
Además, habló de la oposición y pidipo que esté “a la altura de las circunstancias”. Dijo que “siempre hay un escalón más hacia el infierno” y resaltó: “Estamos llegando al 50% de pobreza. Nosotros tenemos que decir basta”.
En relación a su rol en el espacio político que forma, manifestó que se encuentra “muy cómodo poniendo las ideas por delante de las personas” y descartó por el momento una candidatura.
“No hay lugar populismo ligth, para populismo institucional. Esto hay que dinamitarlo. O tiramos abajo la pared del gasto público del 52% que levantó el kirchnerismo o no hay futuro”, sostuvo el expresidente.
Llamó a hacer “una propuesta seria”y amplipo: “Los impuestos a la gente van a ser razonables, hoy no lo son. No puede seguir creciendo el Estado. Tenemos que resolver cosas en poco tiempo porque el mundo sigue avanzando”.
Y en ese sentido, auguró: “No vamos a tener la asistencia del mundo del 2015”.
“El día cero nos tendremos que parar en nuestras piernas y empezar a caminar y bancarnos el nivel de reformas que habrá que hacer. Si el proceso se consolida el mundo va a decir ‘no me quiero perder esto, si por fin corrieron los locos hacia afuera’. Van a querer ver que hagamos los deberes”, dijo el exmandatario.